Con el ascenso y la vuelta del Nueva Chicago de Buenos Aires, la cambiante y ‘supercomplicada’ Primera División de Argentina ya tiene definidos no sólo sus 30 clubes participantes, sino el sistema de disputa y el programa de encuentros, con los clásicos incluidos, un verdadero milagro de Dios en este fútbol criollo tan poco esmerado. Pero antes , quizá durante y después del Campeonato de Primera División 2015 se esconde una trama ya no secreta de sinsentidos, ridiculeces, idas y vueltas permanentes y mucho más. Una trama de larguísima data que someramente cuento a continuación.
El antes: Torneo sí o torneo no
Desde mucho tiempo atrás la Asociación del Fútbol Argentino venía amagando con el famoso torneo largo, rememorando los de las décadas de los 70 y 80. Se habló infinidad de veces en los medios, se hicieron innumerables proyectos que quedaron en los cajones de las oficinas de la AFA. Hasta que a mediados de 2014, con Julio Grondona aún a la cabeza de la institución, se decidió hacerlo. Pero a partir de allí y hasta noviembre, las variantes fueron constantes: torneo corto, largo, a dos vueltas, a una sola, distribución del dinero, problemas con los que fueran ascendidos por el efectivo que recibirían, que algunos clubes de la división superior no querían jugarlo o estaban en desacuerdo con la bendita ‘plata’ televisiva, que el torneo no, que primero uno aún más corto y luego sí uno largo pero a partir de junio para equilibrarlo con el calendario europeo, luego al revés, luego al derecho… En medio de todo, la desaparición de Grondona el 30 de julio y la asunción interina de Luis Segura, vicepresidente primero de la Asociación argentina y mandamás de Argentinos Juniors por entonces. Aún con Segura a la cabeza de manera provisoria, la madeja futbolística se hacía cada vez más enmarañada. Hasta que intervino el Gobierno nacional, socio político-deportivo de la AFA desde mediados de 2009 con el famoso proyecto integral televisivo Fútbol Para Todos, quien decidió su realización. Pero la misma no se hizo concreta sino hasta fines de noviembre, cuando tras más discusiones y discusiones se definió todo lo citado en la introducción. Todo esto mientras se jugaban los campeonatos de las categorías inferiores, en primer lugar la segunda, la B Nacional, que dio los diez equipos necesarios para conglomerar los 30 que disputarán el certamen a partir de febrero.
La actualidad: Proyecto interesante a revisar
Ya conformado y confirmado el dichoso torneo de Primera, ya conocidos los 30 participantes, ahora llega un campeonato muy interesante pero con elementos criticables. El número 130 de la historia profesional argentina arrancará oficialmente en el fin de semana del 15 de febrero, con partidos muy buenos como Boca Juniors-Olimpo de Bahía Blanca, Sarmiento de Junín-River Plate, Newell´s Old Boys-Independiente de Avellaneda, San Lorenzo-Colón de Santa Fe y el actual campeón Racing de Avellaneda ante Rosario Central. Se jugará por el sistema de todos contra todos pero cada uno se enfrentará una sola vez, con excepción de los llamados ‘clásicos’, ejemplo Boca-River, con lo que cada club tendrá un total de 30 compromisos. La primera parte culminará el 31 de mayo (jornada dieciséis) y se reiniciará tras la disputa de la Copa América de selecciones, el 12 de julio. el 13 de septiembre llegará la jornada 24, la de los clásicos, y todo seguirá hasta el fin de semana del 8 de noviembre, cuando se definan el campeón y subcampeón, quienes irán directamente a la Copa Libertadores, mientras los que ocupen desde el puesto tercero al sexto pelearán en una liguilla al estilo años 80 por entrar al máximo torneo sudamericano, y los ubicados del séptimo al decimoctavo, en otra por ingresar a la Copa Sudamericana, la recientemente obtenida por River Plate, segunda en importancia en nuestro subcontinente. Además, dos conjuntos descenderán a Segunda por el legendario promedio, surgido de la división de puntos acumulados por partidos jugados entre agosto de 2014 y noviembre de 2015. Como dije en la introducción, muy organizado y atractivo como pocas veces en el balompié argentino.
Pero no todo lo que brilla es oro: 30 clubes son un récord para Argentina, una plusmarca mundial sólo superada por países ignotos como Madagascar o Congo y una vuelta de cara para la FIFA, que sugiere campeonatos con no más de 16. Y otro lunar es el ya consabido interés del Gobierno argentino por un torneo largo, no sólo para recaudar más dinero para los clubes (que a su vez lo despilfarran a más no poder) sino también para mostrar sus obras durante toda la tanda publicitaria, en realidad una excesiva propaganda prohibida por la Constitución Nacional y duramente criticada por la oposición. Por lo demás, el primer certamen largo extendido en un año calendario desde 1966 parece realmente bueno, con equipos de varias partes del país como sucedía en los viejos y queridos Campeonatos Nacionales de los 60, 70 y 80, aunque no tan federal como tantas veces se discutió por estas tierras. Mucho más fácil de seguir con un calendario lógico, que esperemos no sufra cambios de última como suele suceder por aquí, con clásicos ida y vuelta y con clasificaciones internacionales y descensos mucho más claros que antaño.
El después: ¿Otra farsa?
Pero concluido el torneo y definido el quehacer de los 30 clubes, se sucederá otro sinfín de errores como lo fue en su gestación. Hasta lo sabido en este fin de año 2014, tras la temporada venidera, la 2015, comenzarán a implementarse más descensos y menos ascensos para ir bajando el número de clubes paulatinamente, hasta que previamente al Mundial de Rusia 2018, o posterior a él, se llegue a los 22 pretendidos actualmente por la AFA. Es decir que luego del ya firmado largo 2015, los más de cien clubes de las categorías federadas (A, B Nacional, B Metropolitana, C y D) más los casi cuatrocientos de los Torneos Federales A, B y C (que clasifican a la B Nacional) tendrán tiempo, espacio, energías y motivos para pelearse en las ya agitadas reuniones de Comité Ejecutivo de la máxima institución del fútbol argentino. En una palabra, es probable que la farsa siga, como si la historia de nuestro balompié no contuviera novelas de esta longitud y tenor desde 1931, año de la aparición del profesionalismo, hasta hoy.
Una Liga no tan federal como aparenta y con un solo debutante
De los 30 participantes, 21 son provenientes de Buenos Aires (siete de Capital Federal,once de la Provincia de Buenos Aires y tres de la zona interior bonaerense) y sólo nueve de provincias del interior del país (uno de Córdoba, uno de Mendoza, uno de Misiones, uno de San Juan y cinco de Santa Fe). Competirán en total ocho de los 24 distritos de nuestro país, es decir, sólo la tercera parte. La federalización parece que seguirá siendo un viejo sueño de la AFA…
Además de entre todos los participantes, Crucero del Norte, el humilde pero buen conjunto de Posadas (Misiones), dirigido por Gabriel Schurrer (exdefensa de Lanús que pasó por Racing de Santander, Deportivo de La Coruña, Las Palmas, Real Sociedad y Málaga) es el único debutante en esta nueva liga. Boca Juniors y Arsenal son los únicos que nunca descendieron, aunque el club xeneize es el único en haber jugado todos los torneos desde 1931 a hoy. Y River Plate es el que más campeonato tiene, con 35 títulos profesionales.
En definitiva, así es el fútbol argentino, tan bello y emotivo como cambiante e inconsistente, tan atractivo y con canchas llenas como aburrido y con partidos a puerta cerrada, tan del interior como de Buenos Aires, tan organizado como caótico, tan lleno de luces y sombras a la vez. Si pudiéramos tener un torneo de dieciséis equipos como la FIFA sugiere, con calendario de marzo a diciembre y un poco más organizado en todo, incluidos el programa de partidos, los horarios de televisión y el sistema de fichajes, gustaríamos mucho más del fútbol argentino. Pero parece que desde arriba siguen enarbolando la bandera, como pasa en otros rubros de este país, de la ridiculez ante los ojos del mundo futbolístico entero. Y peor aún, parece que la seguiirán enarbolando.
Los 20 equipos iniciales de Primera División
River Plate (Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Buenos Aires)
Boca Juniors (Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Buenos Aires)
San Lorenzo (Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Buenos Aires)
Racing (Avellaneda, Buenos Aires)
Independiente (Avellaneda, Buenos Aires)
Arsenal (Sarandí, Buenos Aires)
Atlético Rafaela (Rafaela, Santa Fe)
Banfield (Banfield, Buenos Aires)
Belgrano (Córdoba)
Defensa y Justicia (Florencio Varela, Buenos Aires)
Estudiantes (La Plata, Buenos Aires)
Gimnasia y Esgrima (La Plata, Buenos Aires)
Godoy Cruz Antonio Tomba (Mendoza)
Lanús (Lanús, Buenos Aires)
Newell’s Old Boys (Rosario, Santa Fe)
Olimpo (Bahía Blanca, Buenos Aires)
Quilmes (Quilmes, Buenos Aires)
Rosario Central (Rosario, Santa Fe)
Tigre (Victoria, Buenos Aires)
Vélez Sársfield (Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Buenos Aires)
Los diez ascendidos
Aldosivi (Mar del Plata, Buenos Aires)
Argentinos Juniors (Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Buenos Aires)
Colón (Santa Fe)
Crucero del Norte (Misiones)
Huracán (Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Buenos Aires)
Nueva Chicago (Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Buenos Aires)
San Martín (San Juan)
Sarmiento (Junín, Buenos Aires)
Témperley (Témperley, Buenos Aires)
Unión (Santa Fe)