Jaume Roures ha vuelto a salir a la palestra con una entrevista al portal web PR Noticias. En ella declara que la llamada ‘Guerra del Fútbol’ en la que enfrentó a la productora que preside, Mediapro, con Prisa ha finalizado tras la sentencia del Supremo a favor de la empresa catalana, aunque asegura que tomarán medidas judiciales por el perjuicio ocasionado, por lo que no está claro si este conflicto está acabado como él dice. Además cree que un hecho semejante no se volverá a repetir con el otro actor pujante que está desplazando del panorama mediático a Prisa, Movistar, y eso que la empresa que dirige César Alierta le ha quitado los derechos del Fútbol Club Barcelona.
Pero lo verdaderamente significativo que ha arguído Roures son los problemas que el Gobierno pone al crecimiento del fútbol español al dejar en suspense el prometida decreto por el CSD de negociación colectiva de derechos televisivos creando una gran incertidumbre para los equipos, los cuales muchos dependen en gran parte de los ingresos que generan la venta de esos derechos. Ante la inoperancia del ejecutivo español Roures plantea que sea la propia LFP la centralice esa gestión de derechos ya que no necesita obligatoriamente ley alguna.
Lo que se aspira es a llegar al modelo empresarial de la Premier League que acaba de firmar un contrato récord en cuestión de derechos televisivos. Para ello nuestro fútbol tiene que tomar ejemplo del país inglés donde la Premier tiene un alto grado de independencia con respecto a The Football Association y Downing Street, a la hora de explotar comercialmente la competición, sólo delegando a terceros medidas proteccionistas que le benefician como la lucha contra la piratería que lleva a cabo el gobierno británico.
Para poder aspirar a ello debemos seguir el sendero que siguen en toda Europa. Primero, abolir regulaciones absurdas como la del partido en abierto de interés general (y más ahora que se emiten partidos de débil calado tanto que Mediaset no sabe si ponerlo en Cuatro o Energy) algo que supondría un paquete de derechos de mayor valor y por consiguiente mayor ingresos para los equipos. Segundo, que las instituciones se presten a potenciar nuestro fútbol con legislaciones más efectivas que persigan la piratería y un aumento de los patrocinios. Pues para que el fútbol español crezca y se sitúe a los niveles de Inglaterra o Alemania se debe incentivar la televisión de pago, es una ecuación sencilla, cuanto mayor número de abonados, menor coste de la suscripción, el valor de nuestra competición crece más a la par que el nivel adquisitivo de los clubes en aras de un mayor desarrollo. Resultado final, ganamos todos.