La Premier ha sido la primera de las grandes ligas en adoptar el ‘ojo de halcón’/ Getty Images
España es un país al que suelen llegar los ‘inventos’ más tarde. No sabría explicar muy bien la razón de este hecho pero es una verdad como un templo. Cuando aquí presumimos de ser un as manejando la última actualización del software X, en otras partes del hemisferio norte ya llevan meses o incluso años utilizándolo. Y esto es sólo por poner un ejemplo, porque, en todo lo que se refiere a tecnología vamos los españoles un poquito retrasados.
Pero no nos vayamos por las ramas. Venimos a hablar hoy de si es posible aplicar todos esos conocimientos tecnológicos al fútbol. ¿Tecnología y fútbol? Una curiosa combinación que más bien parece imposible, ¿verdad?
Pues ni tan imposible. Son muchos los deportes que han implantado “medidas de seguridad” (permítanme llamarlas así) para corroborar quién ha sido el ganador de una carrera, que una bola de tenis ha sobrepasado la línea, etc. Sin embargo, y hasta ahora, el fútbol parecía resistirse a mezclar sus reglas con algunos de esos inventos.
Inglaterra, como no podía ser de otro modo, fue la pionera en la introducción del conocido como ojo de halcón, que ya se utiliza en deportes como el tenis, a sus encuentros. Desde agosto de 2013, hay siete cámaras apuntando a cada portería de un partido de la Premier League, y si el balón cruza la línea de gol, el árbitro recibirá una vibración y una señal óptica en su reloj en menos de un segundo.
¿Por qué en España no se ha implantado un sistema así? No quisiera criticar al resto de compañeros, pero creo que una de las principales razones por las que España no acoge un sistema como el del ojo de halcón, es porque si las llamadas jugadas dudosas se solucionaran sobre el mismo terreno de juego, más de un periodista venido a menos (y convertido en contertulio fanático de equis equipo) no tendría nada de lo que hablar durante el resto de la semana.
Otro punto de vista es el vicio que tenemos todos los aficionados al fútbol a tomarla con el pobre árbitro. A veces no nos paramos a pensar que no son máquinas. Son personas humanas, como cualquiera de nosotros. Podrán hacer mejor o peor su trabajo, y normalmente si están arbitrando un partido es porque hay un esfuerzo previo que les ha llevado hasta donde los vemos en ese momento. Los árbitros también tienen su formación y van escalando de categoría según mejoren sus virtudes. No es justo que siempre sean la parte más débil y la primera a quién le suelen caer las críticas tras un partido.
Total, que creo que, por desgracia, aún queda mucho para que en España veamos implantar un sistema parecido al que hay en Inglaterra. Se ve que nos gusta mucho la tertulia del día siguiente a un partido y el debatir sobre si un gol lo fue, o no. Pero me parece que un deporte de competición y élite como es el fútbol debe garantizar en todos los aspectos quién ha sido el ganador y no dejar lugar a dudas sobre los resultados-
Si la FIFA y Blatter también son partidarios de la tecnología y la primera prueba de fuego se hizo en la Copa Confederaciones y se espera que se repita en el Mundial 2014, no veo ningún motivo para que España, en esta ocasión, tenga que volver a quedarse atrás.
