La liga se vuelve a abrir. Madrid y Barcelona dependen de si mismos para hacerse con el título. Pero eso hoy no es lo importante, o al menos tan importante. Luis Enrique le ha quitado todo el protagonismo a este hecho. El técnico asturiano nos sorprendió a todos al anunciar en rueda de prensa que hasta aquí, esta temporada y ni una más. «Hay un desgaste», ese es el motivo de su marcha del club culé cuando este curso llegue a su fin. Eso al menos es lo que dijo a la prensa y también lo que habría comunicado a sus jugadores.
La marcha de Luis Enrique se podía esperar. Si su renovación se estaba posponiendo tanto era porque el técnico lo tenía claro, sus sensaciones estaban mucho más cerca de marcharse que de continuar. Por lo tanto no nos ha sorprendido su adiós pero sí el momento elegido. A una semana de enfrentarse al París Saint-Germain y tener que intentar una remontada imposible (nadie la ha hecho en Champions) tras el 4-0 del Parque de los Príncipes. Quizá Luis Enrique quiera motivar a sus jugadores. Las críticas al técnico asturiano descenderían al saberse que no continúa pero los futbolistas no pueden defenderse con ese mismo argumento, les tocaría rendir al máximo. ‘Lucho’ va a dejar de servir de parapeto, por tanto, todos los jugadores culés son los que quedarían señalados ante una debacle en otra competición o no llegar ni a pelear el partido de vuelta al PSG.
El anuncio de Luis Enrique también podría llevar al efecto contrario y que todos los ojos se pongan sobre el técnico asturiano. Habrá quien si el equipo no rinde como se espera hasta el final de temporada culpe al técnico. «Los jugadores saben que el entrenador no va a seguir y no les llega su discurso», algo así podrían vender y podrían tener algo de razón si no se tratase de futbolistas del nivel que tienen los del Barça. Desde luego, la marcha de ‘Lucho’ podría afectar a su equipo, pero no debería y más si cabe porque tras la debacle de París no caerá la furia de la afición sobre el técnico si en la vuelta no consiguen vencer a la historia (salvo que ni compitan).
También se podría pensar que Luis Enrique ha decidido vivir con menos intensidad y sobre todo con más distancia ante la prensa los meses que le quedan. Aunque si estás en el Barça por mucho que se sepa que te vas siempre vivirás con presión. Por tanto, ni tan siquiera el poder vivir con tranquilidad la más que posible eliminación de Champions, nos hace pensar cuál es el motivo del anuncio de ‘Lucho’. ¿Por qué ahora? Incluso con todos los argumentos dados, no está claro por qué ha elegido este momento.
Poco se ha hablado de su posible mala relación con Messi y con otros jugadores de la plantilla, quizá también haya influido o quizá sea un rumor (no lo parece). Al nivel del argentino, desde luego, no se le puede achacar no querer trabajar para Luis Enrique. En los últimos meses (salvo París y alguna otra excepción) ha brillado con luz propia y ha salvado en muchas ocasiones al Barça. Por lo tanto, no parece que sea uno de los motivos de su anuncio, quién sabe si de su marcha. Eso sí, la renovación del argentino parece más cercana en estos momentos, pero eso es otro tema.
Luis Enrique centra todas las miradas y todos los comentarios. Tiene tres meses por delante para mantener el color dorado a tres años que ya pasarán a la historia. Se irá tras haber conseguido todos los títulos. El broche a su etapa como entrenador culé lo conoceremos pronto. Quedan 90 días para saber qué recuerdo dejará ‘Lucho’ en el Camp Nou.