Hace apenas unos meses que el exsevillista Jesús Navas desembarcó en tierras inglesas para unirse a las filas del Machester City. El conocido como “Duende de Los Palacios” tomaba la difícil decisión de dejar su club de toda la vida para seguir su carrera futbolística en otro país, en una liga más dura y con un idioma extranjero.
Nada tiene que ver ya ese Jesús con el que una vez tuvo que ausentarse de concentraciones con su equipo o incluso rechazar la oferta de ir a la Selección por problemas de ansiedad. Ahora, el ‘niño’ se ha convertido en todo un hombre y, después de años de gloria en el Sevilla, ya va dejando huella entre los ‘citizens’.
Tanto es así que su primer gol con los también llamados ‘sky blues’ ya es historia. Llegó en la duodécima jornada ante el Tottenham Hotspur en el segundo 13, convirtiéndose así en el gol más rápido del Manchester City y en uno de los más rápidos de la Premier League. Pero ahí no queda la cosa. Navas marcaría un segundo gol en aquel partido del 24 de noviembre (pocos días después de su 28 cumpleaños) y culminaría así una noche redonda.
Jesús Navas es un jugador que destaca, sobre todo, por su rapidez. Cuando uno busca su ficha, aparece demarcado en la posición de centrocampista, pero realmente es un futbolista más tendente a la banda y que incluso puede atreverse a encarar a portería. En sus años en el Sevilla dio buena muestra de ello. Para el recuerdo quedarán siempre aquellas galopadas que se pegaban él y Capel para surtir de balones a Luis Fabiano o Kanouté.
Sin duda, los mejores años del palaciego se dieron con el Sevilla. Navas llegó al club de Nervión con tan sólo 15 años. A pesar de su juventud, pronto se vieron en él las cualidades y se ganó la confianza del entrenador, con lo que poco a poco fue subiendo de rango y en el año 2003 se estrena en el primer equipo con Caparrós. Luego llegaría la etapa dorada de los títulos (dos Copas de la UEFA, una Supercopa de Europa, una Supercopa de España y dos Copas del Rey) y se convertiría es un verdadero referente para todo el sevillismo.
Tras diez temporadas en el Sevilla, Navas ha disputado 393 partidos oficiales (el sexto jugador que más veces ha vestido la elástica blanquirroja). Sólo en la temporada 2010/2011 estuvo algo más apartado de los terrenos de juego por culpa de una lesión. Y a pesar de los diferentes entrenadores que han pasado por el club sevillano en los últimos años, todos y cada uno de ellos, han visto a Jesús como titular. A día de hoy, su chispa y desborde son imposibles de sustituir.
Problemas de ansiedad
Gracias a su enorme evolución, el extremo fue ganando autonomía y en 2008 le llegó la primera oportunidad de ser parte de la Selección Nacional. Sólo unos problemas de ansiedad que más tarde solucionaría retrasaron su llegada. El caso de Navas es sin duda paradigmático, pues es de los pocos futbolistas que ha hecho esperar a un seleccionador y que ha decidido él mismo cuándo era el momento idóneo para unirse al combinado nacional. Esa decisión la tomó Jesús en 2009 y ya ha jugado 24 veces como internacional, cosechando títulos como el Mundial del 2010 (donde tuvo una participación significativa en el gol de la final) y la Eurocopa del 2012; además de contar con dos goles en su cuenta particular.
Como ven, Jesús Navas es el claro ejemplo de que con esfuerzo y dedicación, todo puede conseguirse. Un chaval muy apegado a su familia, su pueblo y sus costumbres, que ha sido capaz de superar todos sus miedos, porque, en un gesto de madurez, ha querido mejorar su rendimiento y conocer nuevas expectativas dentro su carrera futbolística (que como sabemos, siempre es corta).
Los seguidores del Manchester City ya lo admiran. Hasta los expertos en Premier como Paul Giblin hablan maravillas de él. Y no es para menos. Navas lleva ya cuatro goles en 23 partidos (lo que supera sin duda sus mejores promedios con el Sevilla: en la temporada 2011/2012 hizo cinco goles en 37 partidos, por ejemplo). Ha sabido adaptarse perfectamente al equipo y a una liga y estilo de juego que suelen ser más directos y, a veces, incluso más agresivos. Sus buenas actuaciones, sumadas a las de otros compañeros españoles como Javi García, Negredo o Silva, mantienen al conjunto de Pellegrini en la lucha por el título.
Mucho antes de su traspaso (incluso años atrás), no eran pocas las ‘novias’ que perseguían al extremo español. Ahora, que con los ‘sky blues’ tiene la posibilidad de jugar en Champions League, numerosos ojos se fijarán en él y volverán a lloverle las ofertas. Y ni que decir tiene, en Sevilla, lo recibirían con los brazos abiertos sin duda. Sin embargo, éste es su primer año por tierras inglesas y aún le quedan cuatro más. Le toca el turno ahora a Navas de seguir creciendo futbolísticamente en las filas del City, y como no, de hacer disfrutar a su afición de esta perla salida de la cantera de Nervión.