La Champions League es sin duda la gran competición de clubes a nivel europeo, la que más prestigio y más dinero otorga a sus participantes pero evidentemente no hay sitio para todos. Por ello la Europa League es otra opción para conjuntos que no cuentan con esos presupuestos tan altos pero que merecen mayor premio que el de la permanencia.
Económicamente, los premios nada tienen que ver con el gran torneo, hablamos de cantidades mucho menores y eso que en los últimos años se ha incrementado. Participar en la fase de grupos supone un ingreso de tres millones de euros y luego si irá ganando más según vayan pasando fases hasta un total de quince millones. El ganador de la Champions se embolsa casi 60 millones, es decir casi seis veces más.
Este año hay una gran sorpresa entre ese grupo de equipos que aspiran a esa plaza plateada, el Eibar, que con sus últimas victorias se ha colocado con 50 puntos empatado con el Athletic. La Real se ha vuelto a enganchar a esa sexta plaza con 52. Los dos elegidos deberían salir de esta lista de cuatro: Villarreal (54), Real Sociedad (52), Eibar (50) y Athletic (50).
No obstante, en el último momento puede entrar directamente un equipo revelación, recién ascendido, el Alavés. Los de Pellegrino entrarían de lleno en caso de victoria frente al Barcelona en la Copa del Rey. Hay que remarcar lo de que sea ganador ya que desde la campaña 2015-2016 el subcampeón no consigue este billete a la competición europea.
De todos los candidatos son el Athletic y el Villarreal los que últimamente más han participado en esta competición, los más habituales, aunque si echamos la vista atrás tampoco hace tanto desde que la Real llegó a la Champions League.
Para Escribá, técnico del Villarreal, quedar entre los elegidos sería su última bala para quedarse una temporada más, ya que el batacazo frente a la Roma en el torneo de este año complicó mucho su continuidad, así como también los diferentes altibajos que ha sufrido el equipo a lo largo de la temporada.
Viendo lo que ha conseguido el ‘submarino’ estos años nadie podría creerse que regresaron a Primera hace solo cuatro años, pero Marcelino García Toral logró inculcar un estilo que todavía perdura y se ha apostado mucho más por la cantera que por los fichajes de estrellas sudamericanas de hace unos años. Llevan tres participaciones consecutivas y por puntos son los mejor situados.
Para Valverde, timón del Athletic, quizá sería uno de los últimos “regalos” puesto que su renovación sigue en el aire y no está claro si seguirá al frente de los “leones” la próxima campaña. Comenzaron con dudas pero han ido escalando puestos aprovechando además la pájara que les ha dado a los de arriba. Son siete las temporadas que los vascos han participado en esta competición en lo que va de siglo llegando a la final solamente en la temporada 2011/2012, enfrentamiento que perdieron ante el Atlético de Madrid.
La condición física de Aduriz será determinante para lograr este objetivo y uno a uno cada jugador se ha convencido de que puede llegar más alto si da lo mejor de sí mismo. Afrontarán este final de aventuras sin lesiones, al menos de momento, vital para que todos estén frescos y puedan cambiar un partido en cualquier momento.
¿Dos clubes guipuzcoanos para una plaza?
La Real por su parte ha realizado una gran primera vuelta muy sólida aunque las lesiones les han obligado a olvidarse de la Champions League y ahora aferrarse a una quinta o sexta plaza es todo lo que les queda. Llegan con todo a un final de campaña muy apretado y sin margen de error.
Eusebio Sacristán ha conseguido formar un bloque muy rocoso y ha paliado las ausencias por lesión por jóvenes muy prometedores que pisan fuerte desde el filial como Odriozola o Bautista. El año pasado firmaron una campaña decepcionante pero en esta fueron una de las revelaciones de la primera vuelta.
El Eibar está en una situación totalmente diferente ya que su gran meta en esta temporada es la permanencia por lo que todo esto es totalmente inesperado. Poco a poco su sueño se va convirtiendo en realidad y tiene una plantilla muy enchufada y que cree en sus posibilidades.
Mendilíbar ha logrado dejar su sello personal en este grupo que se libró por los pelos de un descenso a Segunda División y lo ha hecho resurgir de sus cenizas gracias al acierto de Sergi Enrich, que se ha destapado desde la salida de Borja Bastón.
Siete plazas europeas
Para entender un poco cómo se reparten esas plazas europeas, vamos a pensar en todas las posibilidades. Es muy importante dejar claro que entre Champions y Europa League España tiene siete plazas y que pase lo que pase no se alteran.
Los tres primeros clasificados entran en Champions directamente, el cuarto pasa una ronda previa para acceder y si pierde accede a la Europa League (a partir del 2018 esta ronda previa desaparece y pasa directamente).
El ganador de la Europa League desde el año pasado consigue plaza de Champions si no estaba clasificado para ella en el campeonato liguero, el Celta es el único equipo español que podría ganar ahora mismo y sería el quinto clasificado. Si esto ocurre solo habría dos plazas de Europa League, para el quinto y el sexto.
Como ya se ha mencionado anteriormente, si el Alavés gana la Copa del Rey obtendría plaza en la Europa League y por tanto el séptimo clasificado se quedaría sin premio también. Pero además si el Celta fuese a la Champions, el sexto tampoco podría entrar en la Europa League.
Todavía quedan 21 puntos en juego, todo un mundo y más si pensamos que algunos de ellos son enfrentamientos directos, vitales también por el golaveraje en caso de empate.