A veces hay personas que no parecen destacar en algo. No parecen estar por encima de los demás pero nunca están por debajo de nadie. A veces se piensa que son normales y no se les ensalza por lo que hacen pero sin ningún tipo de dudas están por encima del resto y son auténticos fueras de serie aportando sus virtudes a una causa.
Un claro ejemplo de ello es Thomas Müller, el joven futbolista alemán no parece una estrella mundial en esto del fútbol pero sus números y su rendimiento siempre muestran lo contrario. A priori puede dar la sensación que no destaca por sus condiciones que no es un sobresaliente en nada pero en cambio no tiene ningún fallo. Además, no alcanza la nota más alta pero todo lo que realiza lo hace de forma correcta y nunca se le podría poner menos de un notable alto.
Müller es un futbolista polivalente y que nunca hace un partido de bajo nivel. Su carácter, ganas de dar lo mejor de sí mismo y su buen hacer lo convierten en un jugador que siempre responde. Con tan sólo 24 años es un futbolista importante en el Bayern de Múnich y también en la selección alemana, en la que es titular indiscutible desde el mundial de 2010, al que llegó tras debutar poco antes en el primer equipo muniqués gracias a Louis Van Gaal. Thomas tiene la plena confianza de Löw y su puesto en el once inicial germano no se discute.
Cara de niño bueno y facilidad para anotar, pasar, trabajar y sacar beneficios para el equipo. Así es Müller, a priori sin apariencia de futbolista pero como todo ‘grande’ no le hace falta aparentar. Él habla en el campo y ahí, si no es el mejor, poco le falta. Cinco goles y tres asistencias en Sudáfrica 2010 ponen más bonito aún un currículo al que no le falta nada a nivel de clubes. Anteayer hizo su presentación en Brasil. Nada más y nada menos que tres goles para empezar. Así es Müller, él no finge, él no engaña. Su única idea es mostrar sus no pocas habilidades en el césped. Mejor o peor en apariencia, de los mejores sobre el terreno. Thomas ya se ha presentado en Brasil, Müller ha vuelto, aunque podríamos decir que nunca se fue.