Los azulgranas celebran uno de sus cuatro goles al Milan/ AP Photo
Uno de los grandes tópicos del fútbol es aquel que reza: «las estadísticas están para romperse». Hoy para el Barcelona y el barcelonismo esa frase está muy presente. Se aferran a ella para creer en una remontada que parece imposible de conseguir. Nadie ha levantado un 4-0 en Copa de Europa. Así que el Camp Nou tendrá que lucir sus mejores galas y recordar que ya tuvieron otras grandes noches mágicas en competiciones europeas. El estadio culé ha sido testigo de excepción de partidos inolvidables. Encuentros que hicieron olvidar al barcelonimo lo ocurrido en la ida y escribieron una página dorada en la historia del club.
El ejemplo más reciente fue en la temporada 2012/2013. Un mal partido del Barça en San Siro concluyó con un 2-0 para el Milan de Allegri. Era evidente pero no palpable (en aquel partido en Italia) que el conjunto azulgrana era muy superior. Podían y debían creer en la remontada y más si Leo Messi se enchufaba desde el principio. El Camp Nou se engalanó y Messi hizo de Messi. 4-0, justo el resultado que hoy les llevaría a la prórroga, dos goles del 10, uno de David Villa y otro de Jordi Alba dieron el pase al Barcelona.
Unos años más atrás, con Louis Van Gaal en el banquillo, la épica también se pasó por el Camp Nou. Corría la temporada 1999/2000 y habían perdido por 3-1 ante el Chelsea en Stamford Bridge. Regresaban a casa con la obligación de remontar ese resultado y así lo hicieron, con prórroga incluida. Al final un 5-1 les hizo pasar de ronda (hoy no les valdría) ante una afición culé que no paró de festejarlo durante toda la noche. Tenían motivos, habían sufrido y mucho. El 3-1 que forzó la prórroga llegó pasado el minuto 80 de partido. Rivaldo, Figo y compañía brillaron cuando su equipo los necesitaba.
Si todavía nos remontamos más atrás, nos tenemos que parar en el curso 1993-1994. Era la era Cruyff y del ‘Dream Team’, como todo gran equipo que se precie necesita una gran remontada en su currículum. Empezaban los buenos años para un incipiente Dynamo de Kiev. Los ucranianos vencieron en Kiev por 3-1. Un 4-1 en el feudo culé llevó la fiesta a los azulgranas, con Jose Mari Bakero como gran protagonista con sus dos goles. El Barça estuvo a punto de caer en dieciseisavos de final, pero tiró de épica y solo un gran Milan en la final (4-0) impidió la que hubiese sido su segunda ‘orejona’.
Gran remontada del ‘dream team’/ John Kellys
Todavía más tiempo atrás el Barcelona ya tuvo que tirar de magia, en la temporada 1985/86. Aún no había sido campeón de Europa pero lo buscaba con ahínco y qué mejor manera de demostrarlo que con una remontada prácticamente imposible. 3-0 cayeron en Goteborg. Soñaban con la final y les apareció en el camino una pesadilla. Volvieron a la vida en el Camp Nou, un majestuoso Pichi Alonso empató la eliminatoria con tres goles. En los penaltis, llevando a la épica hasta límites insospechados, el Barça eliminó al equipo sueco. Los azulgranas fueron los primeros en fallar un penalti y justo en la quinta pena máxima el Goteborg lanzaba para ganar la eliminatoria. Urruti lo paró y dio vida a su equipo. Al final, Víctor Muñoz transformó el penalti definitivo. La suerte de los penaltis, en cambio, les fue esquiva en la final. No consiguieron transformar ninguno de los cuatro que intentaron y la copa terminó en las vitrinas del Steaua de Bucarest.
Tras mucho sufrimiento y una tanda de penaltis agónica el Barça alcanzó la final/ Mesuqeunclub1899
No solo en Champions vivió el Camp Nou remontadas para la historia, también lo hizo en la Recopa de Europa. En la temporada 1978/1979 el Anderlecht belga ganaba 3-0 en el estadio Emil Versé y dejaba al Barça prçacticamente fuera de la competición. 100.011 personas (según publicó el diario La Vanguardia) se congregaron en el partido de vuelta y dieron alas a los suyos. Los azulgranas respondieron a su público y consiguieron la gesta. 3-0 durante el partido y en los penaltis firmaron su billete para cuartos de final de la competición. Podríamos decir que ésta fue una de las primeras noches mágicas del Camp Nou en Europa.
Espectacular remontada del Barcelona ante un Camp Nou abarrotado/ Mesqueunclub1899
Todas estas remontadas llenan de optimismo a un Barça que se enfrenta a un imposible, levantar un 4-0. Pero el estadio culé tiene experiencia en noches épicas y lo que es más importante, nunca nadie afrontó ese resultado teniendo a Messi, Neymar y Suárez. Un tridente que hace posible cosas imposibles. El Barcelona los necesita a su mejor nivel, pero no solo a ellos. Todos tendrán que estar perfectos. Deben evitar que el París Saint-Germain les haga un gol. Tienen una tarea difícil, pero con la ‘MSN’ en el campo el barcelonismo sueña con añadir a sus páginas doradas la mejor remontada jamás vista en Europa.